Arivka Schmuskovits, de 70 años, le dicen Becky. Una tarde de 2018 le sonó el teléfono. Ella siempre estaba atenta. Del otro lado de la línea se encontraba Silvio Shuster, su marido desde los 18 años. Con un tono algo preocupado él le dijo: “Me bajé de la combi y no sé dónde estoy”. Ella disimuló su angustia y le contestó: “Preguntale a alguien la dirección en la que estás”. Apenas tuvo las coordenadas subió a su auto y lo fue a buscar. El Alzheimer lo había desorientado. Becky sabía que ese llamado significaba un punto de quiebre.
Ese día, Shuster se encontraba en camino a la Fundación Ineco, donde hacía diversas terapias para contener el avance de la enfermedad que le diagnosticaron en 2005. Viajaba desde San Isidro hasta la sede de la fundación, ubicada en el centro porteño, en una camioneta que hacía traslados desde la zona norte de la Provincia hacia la Ciudad. Desde aquel llamado empezó a ir en un remís que lo buscaba por la puerta de su casa, lo trasladaba a Ineco y luego lo llevaba de vuelta hasta el punto de de partida. Pero ese mal momento, que le costó un grado importante de independencia porque ya no pudo viajar solo, llegó luego de más de una década en la que pudo llevar una vida, según Becky, dentro de los parámetros normales. “En mi experiencia, con las terapias correctas una persona puede vivir con Alzheimer y llevar una vida plena durante muchos años”, asegura.
¿Qué es el Alzheimer?
Hoy se celebra el Día Mundial del Alzheimer. Julián Bustín, Jefe de Gerontoneuropsiquiatría y la Clínica de Memoria de Ineco, quien formó parte de la terapia que recibió Shuster, explica que se trata de una enfermedad “gradual, crónica y progresiva”, que se caracteriza por afectar las funciones mentales superiores o las funciones cognitivas, como la memoria, el lenguaje y la atención, entre otras. “Eso se genera como consecuencia de una muerte neuronal acelerada (neurodegeneración) que lleva de manera progresiva a la pérdida de la capacidad de la persona para desenvolverse de forma independiente en sus actividades habituales”, detalla Bustín.
Entre el 60 y 80% de los casos de demencia en el mundo se generan por el Alzheimer, señalan las cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Desde la Fundación Ineco y el Instituto de Neurociencias de la Fundación Favaloro, describen que en la Argentina el Alzheimer es la quinta causa de muerte y detallan que en más del 90% de los casos no es hereditario, sino que el principal factor de riesgo es la edad, con una prevalencia del 5% en personas de 70 años y de 30% en aquellas que tienen 85 años.
Este medio consultó al Ministerio de Salud de la Nación cuál es el panorama respecto del Alzheimer en la Argentina, pero no entregaron ninguna cifra. Según las Estadísticas Vitales, en 2019 en el país fallecieron 1418 personas por Alzheimer, pero ese número no sería representativo ya que la enfermedad está subdiagnosticada, señalan los especialistas consultados.